Benjamín Amadeo, con disco debut, habla de Lali y sorprende: "tengo una parte muy autodestructiva"
Benjamín Amadeo
Hijo dilecto de la TV, el ex “Casi ángeles” saca su primer disco, “Vida lejana”, en el que se muestra sólido como compositor y cantante. Del niño que tocaba punk al artista pop que es hoy. Charla con un chico grande.
Recién llegado de los Estados Unidos, acusa algunos síntomas del jet lag. Dice que los tiene, no se le notan. Afeitado para las fotos y lúcido para la charla, Benjamín Amadeo es de los artistas que entienden que las entrevistas son parte del trabajo. Ni una pizca de divismo en su figura. Se entrega. Piensa, busca las palabras, canta para recordar la letra de una canción, pregunta con discreción la opinión sobre su primer disco -que Clarín escuchó el martes en exclusiva (recién ayer accedieron al material los otros medios)- y confiesa que “los sueños que uno tiene de niño se acomodan con los tiempos. Cuando era chico tocaba punk, quería ser como Dos minutos (banda que nació a fines de los ‘80), me dibujaba la mochila con liquid paper. Arruinaba lo que tenía a mano. Si sos punk a los 16 está bien, vas por buen camino”.
Camino que lo llevó a ser el actor y músico que es hoy, con varios éxitos televisivos encima -de Casi ángeles a Sres. papis, pasando por Tu cara me suena y Peligro, sin codificar, entre otros- y un disco en la gatera: Vida lejana sale a la venta el viernes que viene, enmarcado en el pop, sostenido íntegramente por letras de su puño y letra (ver Un disco cargado...). Un dato curioso es que Te imaginé, el hit que compuso y cantó el año pasado como cortina de ShowMatch, no esté ahí.
“De la única manera que hubiera entrado era como una apuesta desde el punto de vista del marketing. Se pensó en incluirla, naturalmente, porque la canción pegó bien en el público. Más allá de que la haya elegido (Marcelo) Tinelli para su programa, funcionó, la gente la canta, se la acuerda. Pero la verdad es que sentimos que el disco no necesitaba que Te imaginé estuviera adentro como para lograr alguna aceptación extra”, aclara.
Pero es una canción que te da orgullo, ¿o no?
Recontra. Le puse la voz, la cara, la produje, la escribí. Lo que pasa es que yo creo que hay canciones que son pensadas y hay otras que son sentidas. Y ésta fue, en principio, más pensada, para que ocupara el lugar de una cortina, con una cantidad equis de condimentos. Y rápidamente se volvió una canción sentida, porque me gusta mucho la letra, dice cosas que pienso realmente. Sabía que, dentro de la tele, era el tema que más gente iba a escuchar y quería que dijera cosas lindas. Tenía esa misión: tirar buena onda. Pero cumplió su objetivo. Listo, se encapsula, moño, no hace falta sacarle más jugo. Eso no quita que algún día la toque en vivo o la meta en un disco más adelante.
¿Y a “Vida lejana” cómo lo sentís?
Como un disco deseado... Aunque ahora estoy en esos días como de post parto, planteándome todo. Tipo para qué cuento las cosas que cuento, por qué pongo en palabras ideas de esta manera...
¿Todo lo que dicen las letras es sentido, verdadero?
Absolutamente, es el disco más honesto que podía haber hecho. Yo valoro mucho la palabra, por eso hablo poco, declaro lo justo y le doy mucho valor a lo que digo.
¿No te guardás nada a la hora de manifestar el afecto?
Nada. Digo poco, pero no soy reservado, soy cuidadoso. Y descubrí que, con las canciones, lo que vos declarás queda para siempre.
En el rincón de un hotel boutique, con una gaseosa light y su amplio vocabulario al alcance de la mano, a los 32 años marca diferencia del otro lado del grabador. Hijo de una psicóloga social y un político -Eduardo Amadeo-, comparte que “me tomé mucho tiempo para hacer un trabajo bien elaborado desde lo musical y desde lo lírico, porque quería que me representara lo más posible. Hace unos días lo escuchó un amigo y me dijo: ‘Me llama la atención... dice como vos hablás’. Y eso me copó”.
Cuenta que la idea del CD nació “hace 4 ó 5 años, pero la música está en mí desde que era así de chiquitito”. La mano baja, más allá de la altura de la mesa. Y se engancha en el juego de revisar el pasado para rescatar de algún pliegue de la memoria su primera canción: “No sé si es la primera, pero por ahí anda y ni siquiera sé dónde la guardé. Nunca la mostré y no está tan buena tampoco. Fue como la primera vez que hice algo más pop de lo que venía tocando y escuchando: se llamaDesapercibida”. Cierra los ojos, tamborilea, genera un hermoso clima que sus fans adorarían y tararea: ‘Y pensábamos como única salida, me cansaba de pedir que pasaras desapercibida, y así encontrarte y seas mía’. “Era simplona, y quiero creer que si la agarro ahora la puedo mejorar”, se sincera el hincha de Independiente, que tenía al AvioncitoPascual Rambert como ídolo. A tres meses del estreno de La última fiesta -película que protagonizará con Nicolás Vázquez y Alan Sabbagh-, asegura que “nunca tuve ídolos icónicos en la actuación”.
Dice que ahora está en un estado “de ebullición, pero también tengo mis momentos de cuelgue, de soledad. Me gusta estar solo, pienso, no paro con el bocho”. A ése al que recurre para encontrar la mejor explicación de por qué tituló el disco así: “Es el comienzo de un estribillo: ‘Vivo la vida lejana, muero por una señal, que brille más cuando confundimos libertad con soledad’. Y la imagen de la vida lejana es la de la reflexión, la de la sensación de tratar de entender por qué escribo lo que escribo y canto lo que canto. Me gusta tomar distancia de mí para comprenderme. El disco habla mucho de la libertad”.
Y vos hablás mucho de la soledad.
Por eso en esa canción el concepto es algo así como que pido que cuando me esté quedando solo alguien me haga dar cuenta. Sé que tengo una parte muy autodestructiva a la que le gusta que esté mucho tiempo solo... y al final no es lo mejor.
¿Pero no mendigás afecto?
No, para nada. Tiro una botella al mar.
Un sentimental, Amadeo, que sabe, entre otras cosas que sabe, contestar.
RECUADROS
-"Vida lejana": un disco cargado de sentimientos
Editado por Sony Music y producido, entre otros, por 3Musica, Vida lejana está íntegramente escrito y compuesto por Benjamín Amadeo, y echa anclas en el pop, con un sobrevuelo por la balada y por el funk en algunas escalas del camino.
El álbum se abre con Debe ser y cierra con el tema que le da nombre al disco. En el medio se alinean el corte de difusión Volaré,Ornamentales, 10 mil (con inequívoco destino de hit, pegadizo, esperanzador, de esos que dejan el ritmo en la memoria), Ya no hay más, Todavía, Perdí la cuenta, Cómo, Mi último error,Motivos y Mundos paralelos.
Saldrá a la venta el viernes que viene, después de un cuidado derrotero: fue grabado en La Urraca, Tonica y 3Musica estudios y mezclado en Igloo Studios de Los Angeles. “No puedo sentir más que orgullo”, reconoce.
-Sus frases
A pedido de Clarín, Amadeo bucea entre sus 12 canciones y elige tres frases para compartir:
"Si es para siempre no es revolución” ("Esta es de Mundos paralelos. Siento que las revoluciones tienen que terminar, y hasta cerca de cuando empezaron, como para que tengan su efecto. Que sea un batacazo, una huella profunda”).
"Si te llevo como enfermedad que trae la cura” (“Me gustó esa idea de llevar a alguien dentro como enfermedad... La enfermedad es algo involuntario y la imagino, en este caso, como un estado que te toma todo el cuerpo, y que entonces uno lleva al otro como sanación. Es un concepto que puse en Volaré”).
"Ayer perdí el sello que le di, al filo de las cosas que elegí, perdió raíz, fue tan sutil, aún no sabe si es huella o cicatriz” ("Es de Cómo y es muy representativa del arte del disco... Es tratar de detectar qué cosas hemos transitado y cuáles dejaron cicatriz o huella. Siento que pueden ser lo mismo, pero con distinta intensidad: la cicatriz nos modificó para siempre y sobre la huella se puede volver a pisar”).
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Benjamín Amadeo dice de Lali...
"Pasó de ser una ídola a una estrella"
La definición del actor y cantante sobre su colega, que fue su pareja durante cinco años.
Podría ser un tema evitable en medio del lanzamiento de su disco, pero por qué no hablar de Lali Espósito, si ella fue una parte clave de su vida durante cinco años. Si él, además, suele referirse a ella con admiración y cariño, entre otros sustantivos. Y a cuento de lo que generaban públicamente como pareja dice: “Pensá que salía con la chica más famosa de Latinoamérica. Y me banqué lo que sucedía alrededor, por supuesto. Hubiera sido inconsistente pretender que no nos buscaran para hacer fotos, ponele”.
¿Viste su película (“Permitidos”)?
No todavía, porque recién llegué de los Estados Unidos. Tengo ganas de ir por ella y por (Ariel) Winograd, su director, que fue el realizador del especial que grabé para la Fundación Huésped.
¿Con ella quedaste bien?
Sí, muy bien.
¿Te gusta el camino que hizo?
Pasó de ser una ídola a una estrella, con todos los condimentos que eso tiene.
¿Vos también sos estrella?
No me gusta autodefinirme, pero no, no creo... para nada.
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